Cada vez son más evidentes las consecuencias de la indiferencia humana hacia el equilibrio medioambiental. Entre otras manifestaciones negativas, a causa de las emisiones contaminantes, el aire que respiramos ha alcanzado niveles tóxicos inusitados.
Ante tan grave situación, es vital atender las siguientes recomendaciones para proteger a perros, gatos y otros animales domésticos y de compañía, durante las contingencias ambientales:
– Limitar los paseos en espacios exteriores, exclusivamente para orinar y defecar. Y no extender su duración más de lo necesario.
– Realizar ejercicio y juegos, únicamente en espacios interiores.
– Permitirles permanecer dentro de la casa, en áreas frescas y suficientemente ventiladas.
– Asegurarse de que sus bebederos y platos de comida no estén expuestos a los contaminantes del exterior.
– Evitar la exposición prolongada al sol y mantener una adecuada hidratación.
– Aplicar lubricante ocular (de manera preventiva). Especialmente a individuos susceptibles, que han presentado molestias o padecimientos en los ojos.
– Realizar la limpieza de las áreas del hogar expuestas a partículas contaminantes, con plumeros atrapa-polvo y escobas y trapeadores húmedos, para evitar que éstas se volaticen, dispersen y respiren.
Los animales más vulnerables, con los que se deben extremar precauciones, son los cachorros, ancianos, aquellos que se encuentran enfermos o los que pertenecen a razas braquicéfalas (con hocicos achatados).
Ante cualquier comportamiento anormal, como desánimo, fatiga e inapetencia. O en caso de secreción ocular o nasal, tos y dificultad para respirar, es vital acudir de inmediato al veterinario.
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